“Si yo estoy bien, ella/ellos también”.

Soy madre. Y digo “soy” porque es algo que vivo 24 horas al día, siete días a la semana, 52 semanas al año…

Y soy consciente del impacto que tiene en mis hijos mis estados de ánimo…

Si estoy cansada, tengo menos paciencia, si estoy frustrada, aburrida, desanimada… hago las cosas con desgana, sin energía, forzada y el resultado es, como decimos en casa, cuando menos “chuchurrío”. Si me centro en cumplir a rajatabla los objetivos cotidianos (tarea, ducha, orden, etc.) simplemente porque “hay que hacerlo”, actúo con rigidez, dureza y el resultado, una vez más es: un churro.

Pero sin embargo… cuando estoy contenta, me siento realizada, a gusto conmigo misma, cuando he disfrutado de un tiempo especial para hacer aquello que más me gusta y he descansado lo suficiente, mi forma de estar y ayudarles a crecer es flexible, creativa, animosa y alegre y sin duda, además de disfrutar todos en el proceso, los resultados son estupendos…

Por eso, me surge una y otra vez esta frase… “si yo estoy bien ella/ellos también”.

Ella especialmente porque necesita sentir que no “tiene que” llevar todo el tiempo sobre su espalda la “mochila de su diabetes”, que todo está “bajo control”, que puede hacer cualquier cosa que se proponga como cualquier niña de su edad, que su madre y su padre velan por ella y a la vez confían es sus posibilidades para ser autónoma, independiente, salir de casa, ver mundo y volver a descansar a su hogar…

Ellos, nuestros otros dos hijos, porque también se merecen disfrutar de su infancia con alegría, sin responsabilidades mal entendidas ni condicionamientos artificiales, asumiendo la realidad, nuestra realidad, con naturalidad y coherencia. Cuidando las peculiaridades de cada uno y tratando a cada uno “según su necesidad y según sus posibilidades…”.

Por esto, por todo esto, sé que es fundamental que padres y madres nos cuidemos, desarrollemos, disfrutemos… todo ello redundará en la felicidad de nuestros hijos…

Os invito a compartir juntos este camino.

Categorías: Personal

3 comentarios

  • Muchas gracias por este blog! Estoy segura de que va a ser el complemento que necesitábamos para mantener la alegria y la esperanza altas! Lo principal para uno nuevo debutante, nosotros empezamos en enero de este año, es dejar de ser “los raros”, encontrar a gente que te entiende y te ayuda. Yo me comprometo a llenar este blog con todas las buenas noticias a las que tenga acceso por mi trabajo en investigación y a barrer google para descubrir el último avance y que lo celebremos entre todos.

  • Un regalo este blog Carol, creo que puede ayudarnos mucho a todos, sobré todo si nos concentramos en “pensar en verde” o dicho de otra manera, nos apoyamos unos a otros a seguir adelante, con nuestro mejor ánimo, con esta pequeña complicación que nos esta tocando vivir.

    Mi hija Clara es diabética desde hace 4 años ya y también me gustaría, al igual que María, a ayudar en lo que pueda a familias que necesiten hablar con alguien que ya ha pasado el shock inicial y además hacerles ver lo normal que llega a ser la vida cuando vives esta situación, sin miedos.

    Y antes de despedirme os dejo el truco que comenté en la convivencia para subir un glucemia bajita, cuando los enanos ya están durmiendo. Un petit de los de merendar, los de la bolsita de plástico, que se lo toman como si fuera un biberón , es de absorción media y sólo les hace una ración.

    Un beso para todos, mucho ánimo y cuando estéis de bajón, pensar que de todo se sale sí tienes una mano a la que agarrarte.
    Mi mano y mi teléfono 620223878

  • Querida Carol:
    Te doy la enhorabuena por este blog. Como madre de un niño diabético de 9 años comparto tus sentimientos y principios. Me parece un espacio increíble para compartir nuestras experiencias, inquietudes y para cuando sentimos desfallecer, contagiarnos del optimismo de personas como tú. Creo firmemente que la fuerza de estos niños reside en gran parte en la actitud de sus padres. A mi también me ayuda el acto de ayudar. Por desgracia mi trabajo, mis tres niños y mi duro día a día me impiden comprometerme como voluntaria. Tras un año conviviendo con la diabetes me doy cuenta de lo importante que es en los inicios sentirse apoyado por personas con más experiencia en este pequeño universo. Por eso me gustaría ofrecer el poco tiempo que tengo para hacer una pequeña acogida doméstica a familias que tengan un debut reciente, invitarles una tarde a mi casa y ofrecerles una merienda por raciones y todos los trucos y el ánimoque necesiten. Esta sería por el momento mi pequeña aportacion. Aqui va mi teléfono y mis mejores deseos.
    656657845.

Cuéntanos! Déjanos saber lo que piensas.